Ready Player One, de Ernest Cline

Portada en España

TITULO: Ready Player One

AUTOR: Ernest Cline

PÁGINAS: 459

EDITORIAL: Ediciones B

PRECIO: 18€

PRIMERA EDICIÓN: 2010


SINOPSIS:

El libro se centra en el año 2044 y, casi en su totalidad, en el mundo virtual de OASIS, un MMORPG creado por James Hallyday y que se ha terminado convirtiendo en el centro de la vida en la Tierra. TODO se hace a través de OASIS: negocios, trabajos, compras... 

Un día, Hallyday muere con una enorme fortuna detrás suyo y sin ninguna descendencia. Pero en su testamento deja un mensaje claro: ha escondido un Huevo de Pascua (un tesoro) en algún lugar de OASIS y quien lo encuentre, siguiendo las pistas que ha ido dejando, ganará toda su fortuna, junto con el videojuego que le llevó a ser millonario: OASIS. 

Desde ese momento, millones de personas, que se harán llamar gunters, se ponen en su búsqueda. Pero tardarán varios años en encontrar la primera de las tres llaves que les llevarán al preciado huevo. 

Con un enorme golpe de suerte, Wade dará con la primera de las llaves, empezando así un vórtice de sucesos que podrían llevarle a su propia muerte. Esos sucesos, le obligarán a salir de su mundo virtual y tener que luchar, a contrareloj, en el real. 

OPINIÓN PERSONAL:

Este libro lo encontré mientras miraba varios blogs de literatura. Y en todos, decían maravillas de él. Y no pude reprimir mi curiosidad. Al poco tiempo, se lo mencioné a mi novio y mi mejor amigo, dos chicos locos por los videojuegos, y les encantó la idea del libro. No tardé en comprarlo como regalo para mi chico. Lo leyó, le encantó y se lo requisé para poder leerlo. Y no puedo estar más encantada con el resultado.

Se trata de una novela escrita en primera persona, desde el punto de vista de Wade, ya sea desde su vida real o de su avatar, Parzival. La historia se cuenta como si, después de La Cacería, Wade narrase todo lo que ocurrió. Tiene una escritura bastante sencilla (dentro de la temática, por supuesto) y, salvo en algunas excepciones, no se me hizo muy pesado. 

Si he de decir, en resumen, qué me pareció este libro, lo podría hacer en una sola palabra: friki. Es una de las novelas más frikis que he leído nunca. Tiene un culto hacia los años 80 que no había visto nunca. Por no hablar del culto a los videojuegos clásicos. 

Comentando sobre el lugar en el que se centra, tengo que admitir que me pareció dolorosamente real: aunque sea un libro de ciencia-ficción, me pareció que realmente es a lo que podríamos llegar algún día... Un mundo cada vez más envenenado y muerto en el que la gente de clase baja se aglomera en guetos prácticamente sin comida. Donde la muerte de una persona de clase baja o media, no es investigada y rápidamente dejan el caso. Un mundo en el que la gente huye de la realidad para refugiarse en un mundo que no existe, llegando a no saber distinguir entre realidad y ficción. 

Y es precisamente lo que le termina pasando al protagonista, un chico que durante toda su vida ha estado conectado a una consola. Que ha aprendido lo básico con ellas, que va a la escuela dentro de ese mundo virtual... Que no sale de casa ni para tomar un poco el sol. Llega incluso a hacer mejores amigos y a enamorarse, tema que no voy a tocar mucho porque si no me iré más por las ramas de lo normal. 

En un principio, el libro no llegó a absorberme. Pero era muy interesante el mundo que había creado. Ese videojuego y como funcionaba. Por no hablar de la vida que tenía el protagonista, que con razón acababa desquiciado perdido por estar conectado a OASIS durante el máximo de horas posibles: si pudiese evitar dormir y comer por estar conectado a ese mundo virtual, mejor. Pero según empiezan a suceder los hechos, el libro empezó a llamarme desde la mesita. Si que tengo que decir que, las partes en las que se tiraba párrafos enteros describiendo una película ochentera o un videojuego superclásico, se me hacían eternos. Pero después se veía recompensado. 

Algo que me di cuenta que hacía mucho el autor, era irse por las ramas. Literalmente. Quizá estaba narrando como Wade estaba en el instituto y al párrafo siguiente empezaba a explicarte alguna cosa sobre algún videojuego antiguo, alguna película o cualquier canción que se le acababa de venir a la cabeza. Y de esas, cada dos por tres. No me quejo, pues eran los momentos en los que te ibas enterando de como sabía tal o cual cosa, pero me resultó, cuanto menos, curioso.

Y la verdad... ¡no tengo mucha queja de este libro! Me pareció muy interesante, curioso, con puntos en los que te reías, con otros en los que te ponía de los nervios, momentos que no terminabas de creértelo, otros en los que te cabreaba muchísimo... Lo único en lo que me quejaría es que me hubiese encantado saber qué pasaba después del final. No quiero decir que no me guste el final, porque me pareció genial, pero me puede la curiosidad por saber que pasó después de eso. 

ENTONCES... ¿QUÉ?

Es un libro genial, lo recomiendo muchísimo. Pero, sobretodo, para los amantes de los videojuegos (tanto clásicos como actuales), de la cultura de los ochenta e, incluso, de la historia del PC. Ojalá lo disfrutéis tanto como lo he hecho yo.

NOTA PERSONAL: